El Gobierno de Pedro Sánchez ha aprobado este martes el anteproyecto de una nueva Ley de Derecho a la Rectificación, dirigida a los influencers con más de 100.000 seguidores. La medida, presentada por el ministro Félix Bolaños, pretende perseguir la difusión de «bulos» e informaciones inexactas en redes sociales.
Según el ministro, la actual normativa de 1984 está obsoleta y requiere adaptarse a las plataformas digitales. La nueva legislación otorgará a los ciudadanos 10 días (frente a los 7 actuales) para ejercer su derecho a la rectificación si consideran que su imagen ha sido dañada por informaciones falsas.
Aviso obligatorio en contenidos rectificados
La norma obliga a las plataformas y medios digitales a incluir avisos visibles en contenidos rectificados, con enlaces directos a las alegaciones presentadas. Félix Bolaños ha asegurado que esta medida “dificultará la vida a quienes se dedican a mentir”.
La regulación afecta especialmente a usuarios relevantes (influencers), estableciendo un marco legal para tomar acciones judiciales rápidas en caso de incumplimiento.
Esta decisión llega apenas una semana después de que el Gobierno anunciara una inyección de 124 millones de euros para medios de comunicación tradicionales en su proceso de digitalización.
Con esta ley, el Ejecutivo socialista refuerza su intervencionismo sobre la libertad informativa en redes, dejando en el aire preguntas sobre quién definirá qué es verdad y cómo evitar un uso arbitrario de esta normativa.